
La cinta más esperada del universo de terror abre pre-venta y prepara su despedida con un capítulo que marcará un antes y un después.
Durante más de diez años, el universo de El Conjuro ha logrado lo que pocas sagas de terror contemporáneas: consolidar un estilo reconocible, atraer a millones de espectadores en el mundo y convertirse en un fenómeno de taquilla sin perder la esencia del miedo clásico. Ahora, con El Conjuro 4: Últimos Ritos, los fanáticos se enfrentan a lo que promete ser el capítulo más impactante de la franquicia, pero también uno cargado de nostalgia, pues marca el regreso —y la despedida— de los icónicos investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren, interpretados por Vera Farmiga y Patrick Wilson.
La película, dirigida por Michael Chaves, se estrenará oficialmente el próximo 4 de septiembre en salas de cine y en IMAX® de Latinoamérica, pero los más ansiosos podrán asegurar su entrada desde la pre-venta habilitada el 27 de agosto y disfrutar incluso de un pre-estreno el 3 de septiembre. Una estrategia que confirma la confianza del estudio en la fuerza de esta historia y en la fidelidad de un público que ha seguido cada caso con devoción casi religiosa.
La trama gira en torno a un caso que, según la promoción oficial, “lo cambió todo”. Aunque los detalles se han mantenido bajo reserva —como buen sello de esta franquicia—, se anticipa que la historia conectará con la mitología que ha tejido el universo desde 2013, cuando James Wan sorprendió al mundo con la primera entrega. Para los seguidores, esta será la oportunidad de ver en acción por última vez a la pareja que ha sido el corazón emocional y narrativo de la saga.
Además de Farmiga y Wilson, el elenco suma a Mia Tomlinson y Ben Hardy en los papeles de Judy Warren —la hija de Ed y Lorraine— y su novio Tony Spera, personajes que podrían abrir nuevas perspectivas dentro de la narrativa. A ellos se unen Steve Coulter, quien retoma su rol como el Padre Gordon, junto a Rebecca Calder, Elliot Cowan, Kíla Lord Cassidy, Beau Gadsdon, John Brotherton y Shannon Kook. Un reparto robusto que refuerza la apuesta de Warner Bros. por despedir a lo grande esta historia.
Detrás de cámaras, Chaves se acompaña de un equipo creativo experimentado: el director de fotografía Eli Born, el diseñador de producción John Frankish, los editores Elliot Greenberg y Gregory Plotkin, y el supervisor de efectos visuales Scott Edelstein. A ellos se suman Eric Bruneau en la producción de efectos y Graham Churchyard en el diseño de vestuario, con casting a cargo de Rose Wicksteed y Sophie Kingston-Smith. La música, elemento esencial en este tipo de películas, vuelve a estar en manos del compositor Benjamin Wallfisch, conocido por su habilidad para crear atmósferas que mantienen al espectador al borde de la silla.
La historia fue desarrollada por Ian Goldberg, Richard Naing y David Leslie Johnson-McGoldrick, en colaboración con James Wan, quien además de ser creador del universo, funge como una de las mentes detrás de esta nueva entrega. El proyecto cuenta con el respaldo de The Safran Company y Atomic Monster, dos productoras que han llevado el género de terror a nuevos niveles de popularidad en la última década.
La expectativa en torno a El Conjuro 4 no solo pasa por los sustos o por la promesa de una trama “más oscura y decisiva”. Lo que realmente ha capturado la atención es la sensación de despedida. En un tiempo en el que las franquicias suelen estirarse indefinidamente, la decisión de cerrar el ciclo de los Warren otorga un peso emocional adicional. Para muchos seguidores, este será un adiós a personajes que, más allá del terror, lograron transmitir humanidad, fe y vulnerabilidad frente a lo inexplicable.
Colombia, como buen territorio amante del cine de terror, no se quedará atrás en esta despedida. En cada entrega de El Conjuro, las salas locales han demostrado su entusiasmo, agotando funciones y consolidando la franquicia como un referente del género. No sería extraño que este último capítulo repita la fórmula, con filas largas y espectadores dispuestos a gritar, taparse los ojos o abrazar al vecino en plena proyección.
La fecha está marcada: 4 de septiembre de 2025. Ese día, la saga que redefinió el miedo contemporáneo y que unió a miles de fanáticos alrededor del mundo dará su último salto hacia lo desconocido. El resto dependerá de los espectadores, quienes decidirán si Últimos Ritos cumple la misión de cerrar con honores una historia que ya es parte de la cultura popular del terror.